Tipos de Tés Tradicionales de Todo el Mundo

El té es una de las bebidas más consumidas en el mundo. Es originaria de China y proviene de la planta Camellia Sinensis cuyo cultivo da las variedades de té clasificadas por su color: verde, blanco, amarillo, negro y azul verdoso. Por otro lado, las infusiones de hierbas son mezclas de flores, especias o hierbas como manzanilla, lavanda u otros sabores que erróneamente llamamos "tés". Conoce los tipos de té más tradicionales y apreciados de todo el mundo.

Su origen data del s. III a.C. y fue llevado a otras partes de Asia, junto con sus técnicas de cultivo y arte de preparación, por monjes budistas. En Rusia, se hizo muy popular y pronto los británicos también cayeron en esta euforia.

A medida que pasaba el tiempo, cada país desarrolló sus propios métodos y sabores icónicos. Aquí te muestro algunos de los más representativos.

China: Oolong

También se conoce como té Wu-Long y significa "dragón negro". Dependiendo del nivel de oxidación que se les dé, pueden resultar en diferentes tonalidades. Si se aplican niveles bajos de oxidación será similar al té verde con toques florales, por el contrario, cuando los niveles son altos, se parecerá al té rojo.

Se produjo por primera vez hace unos 400 años en la provincia de Fujian y originalmente estaba destinado a uso medicinal. A medida que crecía la popularidad del té, se hizo más importante en los eventos sociales, como un gesto de hospitalidad y poco a poco, como parte de una ceremonia prenupcial.

Los mejores accesorios para hacerlo son una taza de té Gaiwan de porcelana y una tetera de terracota Yi Xing. Solo debes tener en cuenta que la porcelana es un buen conductor del calor, por lo que a la hora de usarla debes tener cuidado con la forma en que se quita la tapa debido a su temperatura. En China y Taiwán, la técnica de preparación más utilizada se llama "Gong Fu Cha" y es un ritual que expresa el máximo potencial de cada infusión si se prepara correctamente.

Inglaterra: Té Negro

El té llegó al Reino Unido alrededor de 1600 para convertirse en un emblema británico dentro de su cultura y cocina. No es para menos, porque al ser una bebida tibia y reconfortante, es muy apropiada en tiempo lluvioso.

En Inglaterra, se toma casi en cualquier momento, pero su famosa hora del té a las 5 de la tarde debe ir acompañada de bollos, crema espesa, mermelada de fresa, sándwiches, pasteles y galletas.

El té negro en Gran Bretaña debe servirse en pequeñas tazas de porcelana con asas para protegerte de las quemaduras. Por lo general, se toma solo o con un par de terrones de azúcar y leche.

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India: Darjeeling

Se dice que los ingleses introdujeron la planta del té en la India para acabar con el monopolio chino. Como heredaron varias costumbres de los ingleses, en la India también es costumbre tener la hora del té que se toma alrededor de las 4:00 de la tarde y generalmente incluye pequeñas samosas que son pequeñas empanadas crujientes con relleno salado o dulce y/o galletas.

Para los Hindúes, el té fue descubierto por Bodhidharma, un príncipe que se había convertido al budismo y había viajado a China para difundir la doctrina. Había jurado no dormir en siete años y después de los primeros cinco, comenzó a sentirse fatigado. Para no romper su promesa, comenzó a morder las hojas de un arbusto que lo llenó de energía. Fueron las hojas de té.

Como en Inglaterra, los Hindúes beben té con leche. Se pueden agregar algunas especias indias como canela, cardamomo, clavo o pimienta negra para crear un “chai masala” (té de especias).

Marruecos: Té de Menta

Nuevamente, tomaremos a los británicos como influencers de una corriente porque, a mediados del siglo XIX, introdujeron la costumbre de beber té en el norte de África porque la Guerra de Crimea amenazaba sus rutas comerciales con los países eslavos, y se vieron obligados a buscar nuevos mercados en esta zona de África.

Pronto se hizo popular en Marruecos cuando mezclaron sus sabores tradicionales: menta, ajenjo y salvia. Su preparación se suele hacer con “té de perlas” verde chino, y es un ritual para celebrar reuniones, negocios, eventos especiales, familiares o para recibir a un invitado. A pesar del calor, se consume caliente porque de esta forma el cuerpo pasa a "temperatura ambiente".

Se sirve en pequeños vasos de vidrio, generalmente de colores. La preparación y los hermosos utensilios que se utilizan, hacen de este té un verdadero espectáculo. Se sirve en una tetera de metal con preciosos acabados y se acompaña de postres típicos árabes a base de miel, coco, nueces, almendras y ajonjolí.

Turquía: Çay

Es una especie de té negro que se sirve en un vaso pequeño similar al marroquí pero curvado como un tulipán. Se sirve con taza de cerámica y cuchara demitasse. En su forma, también es muy similar al marroquí, excepto que el azúcar se sirve a un lado en cubitos para que quien lo tome decida qué tan dulce lo quiere.

En Turquía, se vende, como en muchos lugares de Asia, en la tienda de casas de té, pero también se puede comprar en puestos callejeros.

Se acostumbra a acompañar con un pan simit, crujiente y suave, de forma circular y decorado con semillas de sesame, muy común en Turquía y Grecia.

América: Té Helado

Las personas en Estados Unidos prefieren el té frío y con azúcar. Esta variedad ha tomado diferentes formas a lo largo de la historia debido a cambios en su comercio internacional. En un principio se tomaba con alcohol y con el tiempo este elemento fue reemplazado por té negro helado (solían ser bolsitas de té empapadas) y mezclado con mucha azúcar.

En Estados Unidos es muy común escuchar que una persona pide té helado para acompañar sus comidas, disfrutar de un día caluroso, o como un capricho todos los días.

Rusia: Té en Samovar

China importaba té a Rusia a través de rutas de caravanas desde 1567, un siglo antes de que llegara a toda Europa. Allí, se desarrolló un método original para prepararlo en su famoso samovar.

El té ruso se prepara muy fuerte, concentrado y oscuro. La proporción es mitad agua y mitad hojas de té. Un samovar es un aparato típico que adorna los hogares y se presenta como símbolo de hospitalidad. El concentrado de té se coloca encima. Así que cada vez que se sirve se coloca de 1 a 2 cm de concentrado en la taza y el resto es agua caliente.

Para endulzarlo se acompaña de mermelada, blinis, leche, piel de naranja, terrones de azúcar o fruta confitada. Los ingredientes dulces se mantienen entre los dientes para eliminar el amargor a medida que el líquido pasa a la boca.

Sudáfrica: Rooibos

Rooibos no es un té como tal ya que no proviene de la planta Camellia Sinensis, sino que es una infusión sin los efectos estimulantes del té pero con beneficios antioxidantes. Además es una energía que no provoca somnolencia, es digestiva, isotónica, alivia los cólicos, fortalece los dientes y los huesos, entre algunas de sus ventajas.

Después de la Segunda Guerra Mundial cayó la oferta de té y para reemplazarlo, los ingleses comenzaron a consumir los rooibos que provienen de un arbusto utilizado por la tribu Khoisan, cultivado por "los hombres más viejos del mundo" originarios de la zona montañosa de Cederberg.

Su uso se ha extendido en cocina y se lo suele mezclar con ginebra o ron. Su uso se ha desatado en los mejores restaurantes ya que con esta planta se puede marinar, ablandar carnes (rojas y blancas) o preparar diversos platos salados o dulces.

Ya sea que prefieras el verde, el negro o el oolong, todos los tipos de té provienen de la misma planta, Camellia sinensis, que es una excelente fuente de antioxidantes que son muy buenos para tu salud. Si viajas a estos países, no dejes de probar los tés tradicionales de todo el mundo.

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